30.11.08

El paso de palio

Miguel Lozano





El otro paso, que es el de la Virgen, era de los más ricos que había en la ciudad pues, todo era de plata.

Ya mismamente lo recalcaba Bermejo, gran historiador de las Hermandades sevillanas tras la descripción del paso del Señor de la Sentencia, y es que el Palio de la Macarena, Abogada y Gracia de Sevilla, se ha convertido en fruto devocional a la Señora y se trata de uno de los símbolos más paradigmáticos de toda la Semana Mayor de Sevilla. Hoy se presenta como un sevillano más en el interior del Ayuntamiento, abrumado por la constante visita de curiosos y no tan curiosos, en su mayoría pertenecientes a esa Sevilla de la pandereta y el capirote, para contemplar lo que sin duda la propia historia del arte ha escrito en mayúsculas.
Esta obra de arte no es la primera vez que se presenta en público. A diario, preside el museo de la Hdad. de la Macarena, uno de los más visitados de la ciudad y custodiado por las murallas del barrio. Pero es que en la Macarena, el saber y el sabor toman metas desorbitadas. Sangre verde ha corrido continuamente por el barrio, un barrio lleno Historia y de historias, protagonizadas por gente humilde que pecaron de orgullo al proclamar la Belleza de la Esperanza. Y es que la Macarena da la Esperanza a Sevilla, y Sevilla le ofreció un joyero digno de veneración para repartirla cada Madrugada de Viernes Santo.
La Hdad. de la Macarena ha supuesto una evolución en el diseño del paso de palio. A principios del siglo XX, con un Juan Manuel Rodríguez Ojeda deseoso de reivindicar una nueva forma de entender el bordado, la Macarena estrenaba palios de una manera caótica. El palio decimonónico de Ojeda, fruto de una timidez del propio autor, vendría a sustituir al palio de plata ruolz ejecutado por los talleres Ysaura. Empeño, devoción y mucho trabajo fueron las claves principales para que la Hdad. de la Macarena revolucionara, con Ojeda como principal culpable, el concepto del paso de palio con el estreno del famoso palio “rojo”, el primer palio bordado en malla de oro que permitiría que los primeros rayos de luz de una madrugada agotadora, llegaran hasta el Rostro de la Señora.
La ejecución de un nuevo palio basado en el rojo por parte de Ojeda en 1930, la creación de nuevas bambalinas y enriquecimiento del conjunto doblemente realizadas por el taller Caro en la década de los cuarenta y posteriormente antes de la Coronación Canónica, sería el cenit de la evolución de un paso de palio basado en un clasicismo netamente sevillano. Se configuraría así como un canon dentro del esquema artístico de la Semana Santa, produciéndose una macarenización en muchas hermandades, no solo en Sevilla, sino en toda la región andaluza.
Y ya Sevilla entera pecó de orgullo, tanto por la Belleza de su Dolorosa, como por la majestuosidad de su palio. En 1947, bajo el mandato del Coronel Francisco Bohórquez Vecina, el palio salió fuera de Sevilla para presidir en Madrid la I Exposición Nacional de Artes Decorativas a instancias de la Secretaría de Educación Popular del Estado Español y conrepresentación de la ya fundada Hdad. Madrileña de la Macarena.
Un joyero de plata donde todos los orfebres ofrecieron su obra maestra como cortesía y devoción a la Esperanza. Diseñadores y maestros del oficio, y siempre de primer orden, ejecutaron piezas de gran valor histórico y artístico. Cayetano González, Seco Aguilar, Seco Velasco, Landa Carrasco, López-Fontan, Bautista Lozano, García Armenta, Fernández Gómez… entre otros muchos y dibujantes de gran prestigio como Rodríguez Ojeda, Gómez Millán, Joaquín Castilla han contribuido a esta obra. Todo ello complementado por la finura elegancia que le otorgaba “Ramitos” (y le siguen otorgando sus sucesores) con el clavel, flor sevillana por antonomasia.
Aún así, nada tiene sentido sin su Presencia, pero su valía artística prevalece en puro amor a Santa María de la Esperanza, y el trabajo de la Hdad. de la Macarena, en una Oración a la Señora de Sevilla.

24.11.08

Mañanita de Sevilla

Hoy queremos dejar durante unas horas nuestro emplazamiento habitual y aprovechar la mañana para darnos un paseíto por esta Sevilla nuestra que tanto queremos... veámos...

A los que aman esta ciudad tanto como yo...




21.11.08

La pena Amarga..


Imposible parece que dos escultores distintos, siquiera sean dos genios, hayan podido compenetrarse, como se han compenetrado en la maravilla del grupo de la Virgen y San Juan, de San Juan de la Palma, Luisa la Roldana e Hita del Castillo respectivamente.

Porque no son dos imágenes más o menos hermosas que ha colocado en unas mismas andas la piedad. Es un grupo escultórico, completo. Dos figuras de primer orden que se están necesitando mutuamente y que, cuando se reunen y se juntan, constituyen "un asunto".

Diríase que al juntarse dejan de ser dos estatuas más o menos bien agrupadas, para ser dos personas reales que se van entendiendo. Dos seres compenetrados de un pensamiento mismo e impresionados por una misma desgracia de la que van hablando... sin acabar de creerla -tan inverosímil es- ninguno de los dos... Un grupo de tragedia: la tragedia del Gólgota, en la que no ha tenido necesidad el artista de poner a la Virgen desmayada. Hay allí más tragicidad -y pase la palabreja- que en el desmayo mismo, síntoma de dolor, después de todo, al alcance de cualquier neurasténico. Es más sobriamente trágica la Virgen de la Amargura.

Yo no la puedo mirar, sin que se me vengan a las mentes los dos primeros versos de esa estrofa sevillanísima, especie de "Tantum Ergo" de los septenarios dolorosos:

¿Quién es esa mujer, que angustiada,
vacilante y llorosa camina?


dístico tan descriptivo de cómo ella es, que parece compuesto expresamente para pintarla. La Virgen de la Amargura es eso precisamente: una mujer... angustiada... vacilante... Y llorosa, que camina.

Una mujer: la "más mujer" de entre todas las Dolorosas Sevillanas, y si me apuran mucho, "la única", mujer.

Todas las demás, bellísimas las más de ellas, más que la madre del Cristo padecido, parecen hijas de él. Apenas si representan arriba de veinte años. Tanto ha querido embellecerlas el artista, tanto ha querido pulirlas y acicalarlas, que las ha aniñado. -Así estaría la celestial Señora -me digo al verlas- en los primeros de sus dolores. En sus últimos dolores; en la tempestad de dolor que en expresión del salmo la hunde y la sumerge durante la pasión, estaría... como está la Virgen de la Amargura de San Juan de la Palma: mujer entrada en años, hecha, madura... ¡La Dolorosa del "Desprecio de Herodes" es toda una mujer!

¿Quién es esa mujer, que "angustiada..." ¿Angustiada? he ahí la nota característicade esta Virgen suprema. La angustia más de muerte... "¡La amargura!" más de hiel que ha podido en el transcurso de los siglos empapar un alma: -inebriavit me absintihio- dijo el Profeta: -me emborracho de amargura" - Y así está la Dolorosa de San Juan de la Palma.

Agrupada con el San Juan de Hita del Castillo, que de haberlo esculpido Miguel Angel, hubiérale podido decir como a su Moisés: -¡parla! - diríase que acaba de enterarse, por el Discípulo amado, de la cruenta realidad de la Pasión.

-¿¿De verdad??- parece que la pregunta.

- De la casa de herodes viene saliendo, para tornar al lithóstrotos de Pilato.

La Virgen que lo oye, abarca de una sola ojeada todo el trágico desenvolvimiento de la cruz. El amado de su alma, como a la esposa del Cantar suyo, conviértesele de repente en "manojito de mirra"; su dolor adquire las proporciones inmensurables de su no medible amor, y se le puede decir con Jeremías: -tu dolor, como el mar en extensión... como el mar en profundidad... como el mar en amargura.

Quién es esa mujer, que angustiada, vacilante...

Porque la Virgen de la calle de la Feria va vacilante, con el cuerpo doblado hacia adelante, como para echar a andar, y los ojos desencajados de sus órbitas, con ese peculiar estrabismo del dolor y del espanto, más que hacia a donde apunta el rígido índice del virginal Apóstol, va mirando a todos lados: es decir: a ninguno.

No acierta a mirar nada, quizás por querer abarcarlo todo con la vista... Es tan inverosímil la pasión, tan absurda y tan monstruosa por parte del hombre ue la lleva a cabo, siquiera sea tan sabia y tan providente por parte de Dios que la decreta, que la Virgen la oye y no la cree... ¡necesita: ha menester que se le entre por los ojos, para que tanta malicia y con tanta ingratitud sacrilegio tamaño le quepa como posible en la cabeza!... ¿Qué mal ha hecho, el que pasa por dondequiera haciendo bien?... Y sin que sus vacilaciones en la credibilidad del hecho histórico de la pasión obste a sus lágrimas, derramando más lágrimas que perlas de rocío vierte la aurora, angustiada, vacilante y llorosa... camina.

Porque "camina". No es que va de pié sobre un trono, para ser paseada por las calles en triunfo. Es que camina realmente: ¡anda!

Cuando al peso de la pompa realmente asiática de que la circunda su hermandad se para el "paso" entre la admiración de toda Sevilla embebecida y la estupefacción del mundo entero - la Virgen de la Amargura merece un viaje del Polo Norte- cuando al peso de su propia magnificencia se para el "paso", yo la veo impaciente por volver a echar a andar...

¡No: presidentes del "paso"!... No os detengáis. Y que, o ese San Juan se calle y deje de señalar con el crispado dedo, o adelante... y adelante, y adelante: a ver si encuentra por fin al Hijo de su amor. Al despreciado por loco y por idiota, siendo la Idea arquetipa, suprema, como Personal, de Dios.

¿Qué quién es esa mujer, que angustiada, vacilante y llorosa camina??...

¿Esa? ¡La Virgen de la Amargura, de San Juan de la Palma!

Juan Francisco Muñoz y Pabón
Siluetas de la Semana Santa de Sevilla

17.11.08

Oleadas de amor a Triana




Escrito por Los Nazarenos
sábado, 15 Noviembre 2008

Hoy más que nunca, Triana olerá a mar, como hace 400 años, cuando en su puerto se anclaban los antiguos galeotes de Indias al amparo de tus plantas, Señor Caído. El movimiento de sus calles recordará al ajetreo de los días de fiesta en el muelle, cuando los trianeros se acercaban al convento para pedirte que hicieras posible tu Reino en su tierra, a Ti, que eres el vecino más antiguo de este arrabal, que permaneces a través del espacio y del tiempo, y a quien no hemos dejado de hacerte las mismas súplicas a pesar de ser bocas diferentes.

Hoy caerás tres veces de nuevo, Señor, pero Triana entera estará contigo para ser tu roca. Ni siquiera tendrás la compañía de tu inseparable Cirineo, al que, la fuerza del tiempo, hará que te extrañe cuando salgas a recibir el clamor de tu gente. Padre, tus hijos estaremos a tus plantas para ser el centurión que te inquiere y el caballo que monta. Seremos las mujeres que te vemos caer, como desde hace siglos, camino de casa de Señá Santana en esta madrugada luminosa que abrió ayer el Señor de Sevilla y hoy cierras Tú como Señor de Triana.

Hoy la primavera cambiará su perfumado atuendo, por un dorado atardecer, y abril cederá las horas a noviembre, porque 400 años no se cumplen todos los días.

Tu Madre y tu Abuela quedarán en la pequeña catedral trianera a la espera en Esperanza de tu aclamado regreso. Mientras, recordarán los primeros años que pasaste el puente camino de la urbe…no hace mucho de aquello, y hoy son 400 años… Distinta gente, pero un mismo corazón, un mismo sentimiento, una misma fe inamovible para levantarnos como Tú nos enseñas cada día. Parece ayer cuando te sentabas en las rodillas de Tu Bendita Madre…

Para Ella, para que no esté sola, dejarás esta tarde un reflejo de Sol que se colará a través una vidriera en la frialdad del templo. Esperanza, no estás sola, tu Hijo y Triana están contigo, porque 400 años no se cumplen todos los días… Hoy Triana olerá a mar y será más marinera que nunca, y se oirán a lo lejos, entre murmullos, las salvas que lanzaban los barcos para anunciar a todos que eres el Hijo de Dios.

11.11.08

Tú la llevas....

Foto E. Morillo


Mis amigos Humilitas y El Humilladero se han acercado A los pies de la Giralda para compartir un ratito con nosotros y dejar lo mejor de ellos. Es por eso que continúo con el pequeño juego que ofrecen para amenizar el rato junto a nuestra Torre. Se trata de seguir una serie de reglas, con sinceridad, pues trae adosado un pequeño même.

Seis cosas que me hacen feliz:

1 Mi familia, aunque pase poquito tiempo con ellos... Papá, mamá, niñas... os adoro... ¡Sois lo mejor que tengo!¡Y os echo de menos!

2 Mis amigos, los que de verdad están siempre, se les necesite o no, aunque tarde en hablar con ellos o estemos desconectados, de los que una palabra de apoyo es más que un millón de abrazos o besos.

3 Unos días en la ciudad que amo con toda mi alma, en la Sevilla de mis entretelas, y perderme por sus calles, sus olores, su vida y su encanto particular.Por supuesto acercarme a mis hermandades y vivir un ratito cofrade regado con una cañita o café...o una buena comida como apuntaba mi buen amigo Humilladero.

4 Escribir, pues me hace sacar lo mejor de dentro de mí. Cuando es de verdad todo fluye mejor y me hace sentirme bien.

5 Una escapadita de vez en cuando, a donde sea, para desconectar y conocer otros lugares.

6 La fotografía, la música y la lectura, que son mis principales hobbies y me llenan muchísimo.


¿A quién vamos a dejarle el testigo? Dejaremos que se acerquen a los pies de la Giralda a...

Sevillanaymacarenamente, por ser como es, y por llevar la Esperanza por bandera...

A Fotos cofrades, que sé que no lo contestará, pero gracias por acercarme los momentos cofrades en tu fotografía...

Al Blog de la Sor Citroën, de la que me reafirmo como fan number one... Chicos, a veces una está llena de secretos...

A Las fotos de un cofrade, por tener en el banner superior a Sol que ilumina mis noches y mis días...

A El aguador de Sevilla, por engancharme al mundo de los blog junto con El Humilladero. Sé que no me conoces, pero te sigo hace tiempo...

Y a Pregonero de Sevilla, que no tengo el gusto de conocer, pero quiero felicitar desde estas líneas. De casta le viene al galgo...



El Libro de Reglas dixit:

1 Enlazar a la persona que te lo otorga
2 Enumerar seis cosas que nos hagan felices
3 Hacer constar las reglas
4 Elegir seis personas que continúen con el desafío
5 Avisarlos con un comentario en sus blogs.

Que siga.... tú la llevas!

10.11.08

Sol de Sevilla


Foto E. Morillo



Como rey de los astros…Ella es Reina. Como fuente que nos da vida, Ella es la vida de su barrio. El sol siempre sale por el este; el Sol de Sevilla sale por el Plantinar. El sol del cielo se oculta por el oeste y Ella nunca lo hace. Siempre está y estará brillando aun en los lugares más sombríos del alma humana. No puede ni quiere dejar de brillar para su gente, que tanto ha hecho por Ella para que tenga mejor cielo que el que está en la altura.Y así cada vez que la mire:


El corazón queda raso

Lo mismo que el azul cielo

Al cubrirle un verde velo

Desde la aurora al ocaso.

¿No es un bello sol acaso

el que mejor resplandece?

Pues el cielo bien merece

Tenerla por vecina

Que si al Plantinar ilumina

Con Ella siempre amanece…



Esther Barriuso

II Pregón del Foro Las Cofradías



A mi Señor Cautivo...

Foto E. Morillo


No sé si son Tus manos,
o Tu vidriosa mirada,
o Tu pelo enredado,
o Tu cara angustiada,
lo que me lleva contigo
y que me llega hasta el alma,
lo que me hace seguir
sin perder la Esperanza.
Por eso quedo cautiva,
cautiva de Tu mirada,
presa del sufrimiento
que golpea hasta Tu alma
dolorida en lo mas hondo,
y de Tus manos atada.
¡Rescátame, Señor,
del pozo de Tu mirada!



8.11.08

¡Felicidades Madre! 02.06.08



Rescato en esta entrada un texto que escribí las vísperas del XXIV Aniversario de Coronación de mi Madre Esperanza, para felicitar desde estas líneas a quien me dió la vida...


Falta exactamente un año, Madre, para que los muros de la catedral huelan a la Triana que te ha querido siempre. Un año, Madre, un año para sentir tu brisa de bonanza en nuestras vidas, para que vuelvas a ser ancla que vara el rumbo de nuestros corazones y nos guíes por la senda de tu nombre.


En Triana te echarán de menos, pero vas a tu casa, como aquella tarde de marzo de hace un par de años hizo tu Bendito Hijo. Te echarán de menos, pero estarán gozosos y le contarán a la Señá Santa Ana lo guapa que cruzaste el puente. Como aquella tarde de Junio, las manos más primorosas que un día jamás te tocaron -gracias Fernando por enseñarnos a quererla- estarán esperándote en el Altozano, para decirte que no tardes, que sería capaz de vender al diablo su alma por una sola de Tus Miradas, y que vuelvas pronto… que la próxima vez intentará ajustarte un poquito más la saya al talle y… no puede decirte nada más, porque no será capaz de verte entre lágrimas.


Un año, Madre, para volver a vivir la gloria de Dios mismo hecho hombre y el milagro de la vida, para volver a poner en tus sienes la corona de amor de tus hijos…


Falta exactamente un año… ¡Felicidades, Madre!


Fotografía: www.esperanza-de-triana.es

Mientras suena Virgen del Valle...

Cuentan que todas las tardes, a la hora en la que los jilgueros comienzan su bajo vuelo, se escucha a lo largo de la calle una leve melodía que se escapa a través de una ventana. Cuentan que la melancolía se apodera de la luz y enmaraña las sombras poseídas por las notas de una música tan triste que rompe hasta el aire… cuentan que es tal la tristeza que vaga que hasta podemos sentir su fría presencia… y cada tarde se escucha una y otra vez, como un alma que vaga en el purgatorio, salida de un órgano apocado en un convento, una lánguida sinfonía que vuelve grises las flores y las hace suspirar como si de un duelo eterno se tratara…

Cuentan que esa triste melodía es el llanto de alguien a quien se le partió el alma, son lágrimas de dolor reflejadas en cada nota, quejidos lanzados al mismo cielo como un aullido mudo, gritos silenciados por un pentagrama doloroso al que se le escapa la vida.
Sentimiento reflejado en una clave de sol como un espejo rasgado…

Cuentan que los dedos que acarician las teclas del órgano somnoliento jamás volverán a sentir la brisa ni acariciar un alma, y es tal el dolor que transmiten que, cuentan, quien escucha esa melodía queda invadido por una extraña sensación de tener un profundo vacío…

Y suena una y otra vez, como queriendo devolver al mundo a aquellos dos que esas mismas corcheas un día se llevaron…su padre y su amigo…




Y a pesar de los años, cuentan, que hoy, al son de la triste música, sigue llorando el rosal del claustro por no dar rosas rosa para consolar el llanto de una Madre, por sólo tener espinas para Ella, que bien merece pañuelo de seda blanco como las notas de su pentagrama.

El órgano sigue sonando porque alguien puro lo golpea obsesivamente como si esa melodía pudiera devolverle toda su infancia disfrutada al lado de quien más quiso, mientras viste de pureza el hábito que la acompañará el resto de su vida, tarde a tarde, sentada al órgano, musitando ave marías al son de Virgen del Valle… Su padre no pudo dejarle mayor tesoro…

7.11.08

La noche más larga...


Me acerco a Tu casa. Después de haber vivido unas intensas horas, tengo ganas de compartir Contigo mi inmensa soledad, esa que se anquilosa a mi vida cuando dejas de poseer las calles de Sevilla. Tienes las ojeras de haber penado toda la noche tras Tu Bendito Hijo y en tu rostro permanece aún la sombra de la madrugada. Queda aun en tus ojos el reflejo de la luna y a lo lejos se parece escuchar el murmullo de la gente que Te aclama.

Te has pasado la noche caminando por Sevilla, y yo a Tu lado, sin querer perderme ninguna de las sonrisas que me dedicas en cada esquina, en cada pétalo, en cada sollozo y en cada mirada. Tiendes tu mano y nos llenas de Esperanza. Y en ese momento quisiera ser San Juan y subirme a Tu lado para secarte las lágrimas con el pañuelo que portas.

Pero esos instantes pasaron y ahora Tú y yo compartimos la soledad del templo. Tu candelería parece arroparte para consolarte. Los cirios lloran Contigo y hasta los pétalos de la primera fila se alzan para llenar de color Tu rostro y secar una a una tus lágrimas.

Otro año más, Madre, otro año para volver a pasar la noche más larga a tu lado y decirte que Te quiero, que no me dejes, Madre, que Te quiero.




A los pies de la Giralda...



A tu amparo, con la fuerza de tus piedras, me siento fuerte como tú. Capaz de soportar avatares infinitos y de ver la historia de una ciudad que construye, a marcha forzada, un futuro donde siempre tendrás tu sitio. El tiempo dejó huellas en tu piel y los hombres te dejaron campanas y arte... Eres testigo de siglos y celebraciones que callan tus rampas. Y hasta lágrimas se te escuchan en los albores del verano. Hipertérrita, esbelta, fortificada... para guardar en tu seno la esencia más pura de Sevilla. Así te hicieron para ser la torre más bella del mundo...

No puedo olvidarme de ti, ya lo sabes. Eres presencia martilleante en mis sueños despiertos, el anhelo que me mantiene con vida. Por eso, hoy, abro este rincón para que sea una parte más de ti, una piedra de tu base y un lugar de refugio de mis pensamientos. Márcame el rumbo, pues, y guíame con la fuerza del viento.

Queridos amigos, os invito a todos a reuniros conmigo... A los pies de la Giralda...

Bienvenidos.